El 16 de septiembre de 2017 se cumplió el 30 aniversario de la adopción del Protocolo de Montreal . El protocolo tenía como objetivo regular la producción y el uso de productos químicos que contribuyen al agotamiento de la capa de ozono de la Tierra.
Entró en vigor el 1 de enero de 1989 y ha demostrado la capacidad de las naciones del mundo para unirse para resolver un desafío ambiental inminente. Como resultado del Protocolo de Montreal (y sus revisiones), los gases que agotan el ozono más importantes han comenzado a disminuir y el agujero de ozono antártico, que ocurre cada primavera, está disminuyendo su recuperación.